¿Cuándo ir al psicólogo?
Afortunadamente, ya no vivimos en los tiempos en los que ir al psicólogo era algo para “los locos”, pues cada día se asume más que todos somos susceptibles de pasar por malos momentos en nuestras vidas y necesitar ayuda. Pero sí que aún se observa una tendencia a acudir al profesional cuando el problema está absolutamente fuera de control, y muchas facetas de la vida de la persona ya están bastante afectadas.
El ser humano es más resistente de lo que creemos y a menudo aguanta situaciones que se escapan a su control durante largos periodos en el tiempo, lo que puede derivar en un agravamiento del problema o su extensión a más ámbitos, el desgaste físico y mental de la persona y somatizaciones físicas en forma de problemas de piel, digestivos, insomnio, etc.
Por eso lo ideal es acudir al psicólogo en cuanto se tiene la consciencia de que lo que se está intentando por cuenta propia no funciona, para que la orientación externa y objetiva de un profesional ponga remedio cuanto antes.